El Leyma Coruña visita mañana el Paco Paz a las 18.00 horas el Paco Paz para dirimir el duelo aplazado ante el Río Ourense Termal de la jornada cuatro, que tuvo que ser aplazado por la rotura en los anclajes en una de las canastas.
Un encuentro que, en palabras de Gustavo Aranzana, llega en un buen momento para curar las heridas del equipo. “Anímicamente nos viene bien jugar cuanto antes. Sabíamos que iba a ser difícil (la pasada jornada), porque Prat es un muy buen equipo, no pudimos conseguir la victoria y desde el lunes que hemos empezado a entrenar nos centramos solo en el partido ante el COB, después de hablar de lo que hicimos mal en Prat”, aseveró el técnico.
Para Aranzana los grandes problemas del equipo están siendo en labores ofensivas. “No está faltando productividad. Defensivamente estoy contento, estamos dejando en menos registros anotadores a otros equipos, pero nuestro problema sigue siendo que no anotamos. Hay que mejorar los porcentajes de tiro, no quiero individualizar pero si hacemos un 18 % en tiros de tres y un 40 % en tiros de dos es muy difícil ganar”, apostilló.
No es el único problema que ha detectado el preparador en la escuadra naranja: “A veces nos desangramos, como el otro día ante el Prat, en el rebote ofensivo. Eso me preocupa muchísimo. Con vistas al partido de Ourense, sino cerramos la vía de agua del rebote vamos a tenerlo complicado”. Para subsanar esos problemas, tanto él como su cuerpo técnico han introducido varias novedades. “Hemos cambiado el ritmo de juego, dando un paso adelante en construir, en llegar y no parar el juego y estamos haciendo más posesiones. La rotación está siendo más amplia, estamos dejando los roles (definidos)”, enumeró.
Asimismo, admitió que a día de hoy el Leyma Coruña está pasando un bache. “No voy a dejar de hacer hincapié y de estar motivado y seguir trabajando al máximo para mejorar muchos registros. El equipo no está bien mentalmente porque no ganamos, pero mi obligación es intentar dar refuerzos positivos, trabajar duramente lo que hacemos mal y fortalecer a la plantilla. No nos vale de nada ponernos a llorar, no nos vale de nada solo críticas o destrucción o mensajes negativos, eso no ayuda. No podemos vivir en la negatividad, debemos ser positivos, aunque acumules derrotas y los jugadores se frustren y entre la ansiedad, pero tenemos que intentar evitarlo”, advirtió.
Aranzana quiso ser optimista de cara al encuentro de mañana: “Estoy convencido de que va a llegar una victoria en la que anotemos y juguemos sueltos. Vamos a ganar un partido y nos vamos a quitar una carga de encima”. En cuanto a su rival, no escondió que llega con la moral alta. “Consiguió la primera victoria haciendo un partido extraordinario, con una efectividad tremenda, anotando noventa puntos, jugando fácil… Espero un equipo en línea ascendente”, apuntó.
Y la receta, bajo su punto de vista, para ganar en el Paco Paz es clara: “Tenemos que intentar no entrar en baches, que no haya ninguna circunstancia que nos debilite mentalmente y si el partido si se pone complicado ser capaces de superar las adversidades. Para eso hay que generar unión, grupo, jugando cada vez más juntos y en equipo y que nos salgan las cosas ”.