Los naranjas caen en Pumarín ante un rival que ganó con autoridad

Ganar en la pista del Pumarín sigue siendo un reto pendiente para los de Tito Díaz. Esta noche, el Leyma Coruña cayó derrotado ante el Unión Financiera Baloncesto Oviedo con un resultado final de 82-72. Los locales hicieron una magnífica primera parte con la que atesoraron una renta de 21 puntos, suficiente para compensar la superioridad de los naranjas en la segunda parte del choque y llevarse su séptima victoria en casa, manteniéndose como el único equipo invicto en su cancha.

En la rueda posterior, Tito Díaz felicitó el buen partido de los asturianos y reconoció que se vieron sorprendidos por su intensidad y energía, ya que desde el primer momento “salieron a morder” y taparon las líneas de pase de los naranjas, provocando 15 pérdidas en la primera parte. A esto se sumó el acierto de los locales especialmente en su lluvia de triples.

Para el técnico del Leyma Coruña, la segunda parte fue naranja, a base de emplear las mismas armas del rival: “con energía en defensa, saliendo en los bloqueos, peleando cada balón dividido, trabajando en el rebote y tratando de darle ritmo al partido”. Entre otros aspectos, así lograron reducir las pérdidas de balón y encajar menos canastas que el rival en los dos últimos cuartos, llegando a ponerse por debajo de los 10 puntos.

Lamentó que en ese momento les faltó “un poquito de suerte” para acercarse un poco más y desequilibrar las filas rivales, pero Tito Díaz se lleva a A Coruña la satisfacción de la reacción del equipo, aunque tardía porque “el partido iba ya lejos”, y la buena actuación del joven Pablo Ferreiro, que ha demostrado carácter y que ya es uno más entre sus compañeros, algunos de ellos tocados por diversas contusiones durante los entrenamientos y que hoy no han saltado a la pista, como es el caso de Zach Monaghan y Larry Abia.

Ahora toca aprender de la derrota y centrarse en el nuevo reto, el inminente partido en Riazor, este martes festivo día 6, a las 12:30 de la mañana, contra el Café Candelas Breogán. ¡Jugamos en casa y se tiene que notar! #sentimientonaranja